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Brillante estudiante con brillante porvenir sumido en un futuro incierto lleno de gente enferma y egoísta. En resumen, un puto sensible.

miércoles, 20 de enero de 2010

The sky is fallin'

...Y aquí estamos, en el borde del mundo, en el borde de nuestras vidas desperdiciadas y destinos truncados que dilapidamos con nuestras propias manos, frustrados y desilusionados, cansados de todos. Hartos de un futuro brillante y prometedor que imaginábamos cuando éramos niños, donde el dinero fluye y somos famosas estrellas de rock o artistas, donde nuestras parejas nos aman y comprenden perfectamente y la felicidad exuda por cada poro de nuestras pieles. Donde la felicidad es lo normal porque hacemos lo que siempre hemos deseamos hacer y disfrutamos de ello, sin dolor ni truncadas consecuencias. Sin lágrimas. Y nos damos cuenta a veces demasiado tarde de la ilusión que creamos, el espejismo idealista de un sueño que intentamos crear para poder sentir algo, que se disipa con el tiempo y muere, dejándonos otra vez solos y más usados, entre alcohol y drogas para espantar esos fantasmas mientras negamos lo que podría ser el verdadero sueño que siempre rechazamos y ha estado aguardando, que por miedo o cobardía no conseguimos dar el paso necesario o no encontramos la fuerza suficiente, o que aguardamos una señal, una jodida señal que nos ilumine en este camino enfangado y artificial, mientras seguimos buscando algo auténtico que merezca la pena esperar y luchar por ello. Y ya estamos cada vez más hartos y enfadados por esta realidad.

Por eso es la rabia lo que nos trajo a ese momento después de todo. Es la furia que aprieta mis dientes y cierra mis puños. Es el viento que ruge y enmaraña mi pelo, el mar que colisiona con las rocas en explosiones de sal, mientras el cielo rompe. Respiramos fuerte, saboreando el momento, mientras se crea todo a nuestro alrededor, entre furia y violencia húmeda, y por fin lo comprendemos. Que es éste el momento.

- No me importa la lluvia. No me importa mojarme. No siento frío.-
- Yo tampoco. No es frío lo que siento.-


Y no hace falta decir más. Porque no importa ni el pasado ni el futuro. El miedo es devorado por la rabia con violencia y dejamos que el viento nos lleve y nos cale en los huesos, dejamos que el mar se enfurezca y que la lluvia nos empape por completo, no nos importa porque es el momento de algo enorme y no hay que temer por ello, puesto que la vida nos debía con creces ese toque etéreo y efímero, el momento que dura y marca el alma para siempre aunque termine, el calor que produce y hace temblar, la emoción y fuerzas recuperadas, el sentimiento de que existe un destino desconocido que nos aguarda sin importar lo que venga a continuación. La vida nos seguirá regalando momentos como éste. Entre la rabia y el deseo. En nuestros recuerdos, while the sky is falling.

http://open.spotify.com/track/5zGCuaeuWkkmbGMSs49DkZ

2 comentarios:

  1. Si la vida no nos regalase esos momentos, ese toque, no tendría tanta emoción... ¿no te sientes maravillado cuando vives algo parecido a una película en tu vida real?... siempre supera a la ficción ;D

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  2. Más que maravillado, siento con estos momentos que merece la pena vivir y luchar :3 Mi realidad siempre supera la ficción xD, y qué mejor película que la de nuestras propias vidas?

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